En el Clausura del 2004
llegaba desde Santiago Wanderers un volante de contención, de grandes campañas
en los porteños, fichaba por la Universidad Católica.
Se trata de Jorge
Andrés Ormeño Guerra, que con 27 años se convertía en el primer refuerzo de la
UC para afrontar el torneo clausura 2004 tras una campaña para el olvido, en el
apertura de ese mismo año.
No tardo en ganarse la
titularidad, primero haciendo dupla con Jorge acuña y después luchando solo en
el medio campo, se fue ganando poco a poco el corazón de los hinchas cruzados
que valoraban el gran esfuerzo y la gran identificación que iba mostrando
Ormeño por la camiseta de la UC.
Ganador de 3 títulos
con la franja (dos títulos nacionales y una copa chile) siempre como titular,
ormeño paso a la historia como un gran jugador, un referente y quien siempre
defendió a muerte esta camiseta.
Pero lamentablemente
las historias no son para siempre y llego el momento en que Jorge Ormeño dejaba
la UC. No sin antes despedirse de la gente que tanto lo apoyo estos 8 años en
el equipo.
“Estoy
eternamente agradecido, no tan sólo de mi parte sino de mi familia, que siempre
estuvo conmigo en los primeros años, cuando vivíamos acá en Santiago. Cuando
veníamos en familia acá siempre se lo hacían sentir, eso no se va a olvidar
nunca y muchas gracias por estos ocho años, por la amabilidad que tuvieron
todos y por el cariño que me brindaron”
Es el adiós de un
Grande, de uno de los últimos ídolos de Universidad Católica, quien nunca dudo
en defender esta camiseta de quien fuera y siempre lo entrego todo en la
cancha. Como cruzados nos alegramos que puedo lograr cumplir su sueño de
retirarse en el equipo que lo vio nacer y del que siempre fue hincha, pero que
nunca olvide que siempre estará en nuestros corazones.
Y tal y como se le
canto en el ultimo partido de la UC en el apertura: “Ormeño, Ormeño Querido,
Los Cruzados, Jamás Te Olvidaran”.
por Marcelo Bustos, en twitter lo encuentras como @xelo16
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